El té
verde, como todos los productos que se obtienen de la planta conocida
como Camellia Sinensis, tiene capacidades astringentes. Debido a la
presencia de taninos en ella, esta planta literalmente seca ciertos
jugos gástricos, provocando, por consiguiente una mayor dificultad para
evacuar las heces.
De todas formas, el té verde es bastante menos
astringente que el té negro, sin ir más lejos. Es una infusión más
suave, con menos taninos y, por consiguiente, puede que te afecte menos a
tus problemas de estreñimiento.
Lo que puedes hacer para contrarrestar este
inconveniente es incorporar mayor cantidad de fibras a tu alimentación.
Estas estimulan el peristaltismo intestinal, ayudando a que se “mueva el vientre”. Las puedes encontrar en vegetales, frutas, semillas y frutos secos varios.
También, llegado el caso, puedes intentar con el
rooibos. Esta planta es un excelente sustituto del té rojo, brindando
propiedades muy similares, pero con un bajo nivel de taninos y sin
cafeína.
Fuente: aperderpeso.com
Mujer: Té verde y estreñimiento al perder peso
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